Por: Ana María Montiel.

En el municipio de Apizaco la delincuencia anda suelta y no hay quien la pare. Hartos de la inseguridad, los ciudadanos a través de sus redes sociales exponen y hacen públicos los asaltos que a diario se registran en varias partes de la demarcación.

Aún conociendo la alta incidencia delictiva, el alcalde Pablo Badillo Sánchez poco o nada le interesa el tema, pues se la pasa en ceremonias cívicas y en actos de protocolos para reverenciar a la gobernadora MORENISTA Lorena Cuéllar Cisneros.

Tan grave es la situación, que ha obligado a los comerciantes establecidos a buscar estrategias de forma conjunta para frenar la delincuencia que opera en el municipio sin que la policía sea capaz de frenarla.

Esto deja en claro, que no existe una estrategia para el combate del hampa que a todas horas del día ataca en diversas calles del municipio rielero, aunado a la ineficiencia del director de Seguridad Pública Raymundo Fragoso Muñoz, quien prefiere ocultar información durante las mesas de seguridad, como el pasado 8 de junio, cuando reportó al municipio sin novedad, ocultando la violación y los golpes de la que fue víctima una menor de 16 años.

Dicha menor fue reportada ilocalizable por un lapso de diez horas, aproximadamente, y según versiones de los familiares y amigos, habría salido a la papelería, lo que generó alerta entre sus familiares y vecinos que se movilizaron para buscarla, pero al ser localizada, presentó golpes y señaló haber sido violentada sexualmente.